Guayasamín no sólo fue famoso por sus pinturas, también fue famoso por sus esculturas. La mayor parte de sus esculturas son hechas de metal, aunque algunas son hechas de piedra, madera o de arcilla. Las esculturas de Guayasamín, por lo general, son de figuras humanas que demuestran sus sentimientos. El estilo de sus esculturas es muy similar al de sus pinturas. En las misma manera, su estilo es muy emotivo. Esto se ve claramente en los gestos de las caras y en la postura de sus cuerpos. El sentimiento es muchas veces de sufrimiento, de valor, o de alegría. Al igual que en su pintura, las esculturas de Guayasamín, tienen formas geométricas angulares y cuadradas. Las formas de los rostros y de los cuerpos humanos son de descendencia indígena. Para mayor impacto, su estilo demuestra similaridades a la época pre-colombina o el arte primitiva. El arte de Guayasamín es similar al de los muralistas mexicanos de medio siglo antes.
Rumiñahui, 1994 es una escultura hecha de metal. La figura es de un hombre que está parado entre dos columnas gigantescas. El hombre es de tamaño grande, y tiene sus brazos en alto hacia un sol que está entre las dos columnas. Sus manos se presentan como puños, dando la imagen de valor, orgullo y victoria. La figura es muy musculosa y el estilo es angular.
Cabeza de Hombre es una escultura hecha de piedra. La cabeza tiene una forma cuadrada. Su cara es muy seria. Parece la figura de un padre. Es parte de una serie de esculturas que incluyen Cabeza de Niño y Cabeza de Mujer.
La Patria Joven, es una escultura que muestra tres figuras: una mujer, un hombre y, en la mitad, un niño. El niño tiene sus brazos en alto hacia el cielo. La parte baja de los cuerpos de los “padres” está compuesta de una columna que está hecha de pequeños triángulos de color rojo. Es difícil saber si los “padres” sostienen al “hijo” por su torso o si el “hijo” les sostiene a ellos.
Yo me gusta como el uso diferentes materiales en una obra de arte.
Tiene un estilo muy distinto, las caras de todas son muy similares.